Hoy mi Shen (Mente en Chino) está intranquilo. Hoy no logra asentarse en el corazón y como consecuencia: voilà!! Insomnio!!
Pues bien, la Mente desde el punto de vista de la MTCh (Medicina Tradicional China) es uno de los pilares básicos del desarrollo del ser humano. Claro que Mente o Shen, no es un concepto reductivo, como a veces solemos simplificar en Occidente. La Mente no es sinónimo de Cerebro, Materia Gris o Pensamiento. Abarca mucho más que esto.
El concepto de Shen a veces se traduce como Mente, otras como Espíritu, y habla de éste como concepto que se refiere a la propiedad que da vividez al pensamiento, al raciocinio, a la expresión, al brillo de los ojos, a la creatividad, a la motivación, a la memoria, a la emocionalidad, al sueño.... El Shen se moviliza y acompaña activamente durante el día, pero se guarda por la noche en el corazón, donde descansa y se recupera.
Un Resonador Nuclear Magnetico Funcional (RNMf), hoy en día nos muestra imágenes fabulosas de cómo nuestras acciones, pensamientos, visualizaciones, etc. crean flujo y aumento de irrigación sanguínea en áreas cerebrales diferentes, dependiendo de la función realizada, lo que nos facilitaría en la actualidad el comprender dónde se crean ciertos procesos mentales. Ahora, desde mi perspectiva estamos recién descubriendo esta información, incluso me atrevería a decir que el flujo aumentado no demuestra donde se crea un proceso mental o emocional, sino es solo la manifestación de lo que hoy podemos ver... seguro si tuviésemos otras maquinarias veríamos la frecuencia y onda que emite nuestro ser, algo parecido a lo que es capaz de hacer las cámaras de Kirlian, pero incluso esto nos muestra un fragmento... y seguramente, al aumentar nuestra capacidad de observación (ya sea con máquinas o apertura de conciencia) lo que se vería sería mas que un influjo de sangre hacia una área cerebral. Por eso, el Shen ha sido un concepto utilizado para comprender aspecto del ser humano, pues no lo enmarca en una localidad específica y restringida, es más fluido y movedizo. La mente como Shen no está sólo en el cerebro, sino recorre la sangre, se nutre de la unión del Qi ancestral y del Qi adquirido (herencia y alimentación), se renueva cada vez que entramos en estado de sueño.
Concluyendo dijimos que el Shen se alberga en el corazón. Por lo tanto, cómo hemos dicho anteriormente, la concepción de MTCh es reciproca. Si vivimos procesos de alteración del sueño prolongados en el tiempo, esto afectará el corazón y por lo tanto el entendimiento. A la inversa, si por equis motivo poseemos alguna enfermedad congénita o heredada que afecte el funcionamiento del corazón esto se verá reflejado en el Shen, por lo tanto en el sueño, y en la claridad del pensamiento, así como otros aspectos que incluyen el Shen (como la memoria, la conciencia y emocionalidad).
Por tanto, cuidar la mente no es solo cuestión de pensamiento. Armonice su corazón, nutra su sangre y armonice sus emociones, así estará cuidando su Shen, y la claridad de pensamiento vendrá por añadidura.